¿Por qué Christian Vieri, el ‘Ejército de un Hombre’, terminó con tan pocos trofeos?

La paradoja de un delantero dominante

Christian Vieri era un tanque con botines. En su mejor momento, fue quizás el delantero más temido de Europa, una máquina goleadora que desarmaba defensas solo. Pero su palmarés (un Scudetto, una Coppa Italia y una Recopa de Europa) parece insuficiente. ¿Cómo es posible?

Juventus: Un comienzo engañoso

Su único Scudetto llegó en 1996-97 con la Juventus, pero no era el protagonista. Alessandro Del Piero emergía como figura mientras él marcaba 11 goles en 23 partidos. Se fue al año siguiente… justo cuando la Juve llegó a la final de Champions.

Nómada: Atlético y Lazio

En el Atlético de Madrid (pre-Simeone), los títulos eran utopía. En Lazio (1999), con Nedvěd y Verón, lideraron hasta el final… pero cayeron ante el Milán. Al año siguiente, Vieri se fue al Inter… y la Lazio ganó el doblete. Ironía pura.

Inter: Crónicas del ‘agujero negro’

El Inter de los 2000: Ronaldo, Recoba, Seedorf… y cero títulos en seis años. Vieri anotó 143 goles en 190 partidos, pero el caos interista era legendario: cambios técnicos, dramas internos y la debacle de 2002 contra la Lazio que le regaló el título a la Juve. Ni un ‘ejército’ podía salvarlos.

Azzurri: La sombra de las lesiones

Con Italia, perdió sus dos grandes oportunidades: subcampeonato en Euro 2000 y Mundial 2006 (lesión). Su mejor momento fue el Mundial 1998, donde cayeron ante los campeones, Francia.

Veredicto: ¿Mala suerte o malas decisiones?

Su falta de trofeos no fue por falta de talento, sino por timing y caos interno. Cambió mucho de club (9 en 18 años), se unió a proyectos inestables (como el Inter) y brilló entre épocas doradas. Comparado con Didier Drogba (que triunfó en el Chelsea estable), su caso duele. Pero cualquier defensa de los 90 lo recuerda: Vieri era una pesadilla. Palmarés escaso, pero legado inmenso.